“Pa’i Puku” (“Padre Alto”) es el cariñoso apodo en lengua guaraní para Mons. Pedro SHAW, que falleció en 1984 en el Chaco paraguayo, donde trabajaba primero como misionero y después como obispo en el Vicariato Apostólico del Pilcomayo.
Pronto, el
pueblo comenzó a venerarlo como santo. A partir del año 2008, los oblatos de la
Provincia del Paraguay comenzaron a promover una investigación y los pasos para
abrir la causa de beatificación, autorizada en 2010 por el Superior General.
Al año
siguiente, se publicaron dos libros sobre su vida, aparte la amplia investigación.
Además, se estrenó un himno en guaraní, cantado por un cantante y acompañado
por un arpista muy conocidos en el país.
Otra
publicación destaca las 8 obras en el Paraguay que ya llevan su nombre: calles,
un estadio, una escuela, una radio, empresas comerciales. A eso, se añade ahora
una capilla, que se erige como futuro santuario en el lugar de su accidente
fatal, con la aprobación del obispo de la diócesis donde falleció, quien
también lleva adelante el proceso diocesano de la causa. El cartel del proyecto
llama la atención a los muchos conductores que pasan por esta única ruta que
cruza el Chaco y lleva hasta el país vecino Bolivia.
El pueblo, que testimonia gustosamente sus experiencias y recuerdos con
el Pa’i Puku, e incluso las gracias recibidas por haberlo invocado, espera
ansiosamente, que se reconozca pronto la santidad de este Siervo de Dios; y que
puedan venerarlo en ese santuario. (Miguel FRITZ)